La casa era una gran mansion del siglo XVII y el acceso era un camino flanqueado por unas imponentes Palmeras , que fueron traidas por los musulmanes a la isla hace siglos , un trayecto de unos dos kilometros , hasta ver la imponente entrada , una doble puerta enrejada en cuyo centro estaba el escudo del Olmo , simbolo de la casa Agrimonte .
Awen Bellveria , jefe de la casa Bellveria , habia recorrido este mismo camino inumerables veces . Siempre era lo mismo , una reunion de las cinco casas que dominaban la isla , para discutir los temas que producian algun conflicto que pudiese romper la armonia existente entre las diferentes facciones , que estaban sujetas a la autoridad de la todopoderosa Casa Agrimonte.
Pero ahora era diferente , muchos años de intrigas y rencores habian convertido la paz existente en una fragil y delgada linea que se podia romper en cualquier momento.
Awen habia estado gestionando todo el sistema portuario durante los ultimos años , la influencia de su casa se extendia desde el Paseo Maritimo de Palma hasta el ultimo pueblo del Noroeste de la Isla , San Telmo.
Las otras casas se pusieron nerviosas por la enorme influencia y poder , tanto politico como economico , que habian adquirido. Las casas de los Mandez , los Meritones y los Crissos se habian quejado de eso a los Agrimontes .
Por eso se habia dispuesto esa reunion para evitar cualquier tipo de conflicto , que pudiese derivar en una guerra .
Pero Awen sabia que la imparcialidad de los Agrimonte era fingida , estos tenian un lazo de parentesco muy fuerte con los Meritones , la hija de estos ultimos estaba casada con el primogenito de los Agrimontes , Ikaris , el joven.
Asi pues la reunion no era para arreglar ningun problema , mas bien era para advertir a los Bellveria de que su enorme influencia no estaba siendo bien vista por los demas.
El coche llego a la entrada de la mansion , flanqueada por dos hombres que llevaban tatuados un Olmo en el cuello . El primero en bajar del vehiculo fue el hermano de Awen ,Belarus , seguido de el hombre de confianza de los Bellveria , Icto Berardus y dos de sus guardaespaldas , por ultimo Awen , con paso firme , pero con un semblante serio y preocupado en su rostro.
La entrada principal de la casa daba a un patio interior , una escalera imponente que se bifurcaba a derecha e izquierda era el acceso a la planta superior , donde se encontraban las dependencias principales de los Agrimontes , el edificio como tal no servia de vivienda , mas bien era como una sede desde donde se gestionaba el control sobre las otras Casas.
A pie de escalera una media docena de hombres , impecablemente vestidos y con semblante serio esperaba a los invitados , Awen vio alli a los jefes de las demas Casas , Hiros "el viejo " de los Meritones , Fielwen de los Mandez , Alvar de los Crissos , y por ultimo , quizas el unico aliado de los Bellveria , Armel de los Barske .
Todos se saludaron con cortesia , cada jefe iva acompañado de cuatro hombres , por jerarquia , el cabeza de cada casa , su mano derecha , su hombre de confianza y dos guardaespaldas.
Todos los invitados subieron arriba ( menos los guardaespaldas ) y tras franquear un arco de seguridad , entraron a una sala de grandes dimensiones a cuyos lados habia una serie de puertas, una mesa en el centro y el escudo de los Agrimontes en la pared frontal era todo el mobiliario de la misma , a pesar de su austeridad , la sensacion de un aire regio presidia la estancia . De una de esas puertas salio Ikaris el supremo jefe de jefes , con aire serio y voz profunda dijo:
- Sed bienvenidos a mi casa , la reunion ha de comenzar -.
Entonces todo el mundo alli presente se sento para exponer sus puntos de vista , seria una noche larga , muy larga , en la que se decidiria la continuidad de esa fragil paz que hasta ahora habia reinado....
El primero en tomar la palabra fue Awen , se puso en pie y con voz solemne y grave dijo:
-Soy Awen Bellveria , hijo de Belverus , jefe de la casa Bellveria , señor de mas de treinta mil almas que para mi trabajan , responsable de todo el sistema portuario por eleccion legitima de los aqui presentes . Mi casa controla todo el territorio desde el Paseo Maritimo hasta San Telmo , y aqui estoy por decision propia para contestar y tranquilizar a los que aqui estan reunidos -
La primera en la frente , penso Belarus , siempre ha sabido decir lo propio y lo solemne.
Todos los alli reunidos asintieron con un gesto , Icto Berardus penso que eran unos hipocritas.
Entonces en aquel momento Ikaris , tomo la palabra.
- Jefes de las casas de la isla , estamos aqui para aclarar algunos aspectos de nuestros negocios , no para discutir , ni para enfrentarnos entre nosotros , la casa Bellveria ultimamente a adquirido mas poder y eso ha puesto algo nerviosos a los demas aqui congregados , para evitar malos entendidos y errores hoy aclararemos nuestro lugar en esta honorable corporacion .-
Tomando un sorbo de agua , se sento y prosiguio: - Awen , te conozco desde que naciste , siempre me demostraste que eras , y eres una persona razonable y capaz , asi que hoy quiero apelar a tu sentido comun y tu razocinio para que nos tranquilices , ultimamente tu influencia ha aumentado y tu poder es cada dia mas grande sobre las demas casas. Esta reunion solo es para estar seguros de que aun eres el Awen que conocimos... nuestro Awen- .
Awen , miro a todos los jefes , y se dispuso ha hablar y exponer su postura.
- Jefes ... amigos de las casas de la isla , todos me conoceis , sabeis quien soy , nunca he intentado perjudicar ni hacer mal a nadie, me disteis la gestion del puerto , cuando la gente de Marsella lo controlaba , delegasteis en mi esa tarea , tarea que yo cumpli expulsando a los Marselleses y consiguiendo dominar todo el sistema portuario , comparti mis beneficios con todos vosotros , es cierto que ultimamente he adquirido algo mas de influencia en algunas esferas politicas , pero nunca he negado ayuda a nadie con las mismas, ahora me encuentro aqui dando explicaciones por haber prosperado , y digo yo ¿ es eso justo ? , creo que no , como he dicho antes nunca he intentado perjudicar a nadie , pero la casa de Bellveria no consentira que la acusen de algo que no ha hecho , ni consentira que no la dejen crecer por temor , no queremos el poder para influir sobre los demas , siempre hemos compartido y siempre lo haremos , en la medida de lo justo , pero jamas consentiremos que nos pongan limites a nuestro propio crecimiento , quizas la cuestion sea otra , mi pregunta es ¿ quien ha pedido esta reunion ? -.
- Awen , esto ha sido de mutuo cuerdo entre todos - dijo Ikaris.
-Un momento- exclamo Armel - Nosotros los Barske no hemos pedido nada , conozco a Awen hace muchos años y jamas me ha dado motivos para desconfiar , no posee un poder militar mas grande que el de las demas casas nunca ha demostrado prepotencia ni ningun intento de superioridad sobre nosotros , y siempre ha sido respetuoso con los demas , a parte de acatar tu autoridad Ikaris , yo no pedi esta reunion , y tampoco me siento amenazado por los Bellveria-.
En ese momento el siguiente en hablar fue Hiros .
- Es cierto que Awen nunca nos ha demostrado nada que nos hiciera pensar que fuera hostil a nuestros intereses , pero su creciente poder nos deja en desventaja a los demas , quien nos dice que el dia de mañana no va a querer ostentar el simbolo del Olmo -.
La tension recorrio la sala y todos miraron a Awen esperando un estallido de furia , pero muy al contrario solo escucharon una risa , que sin llegar a carcajada dejo a todos los demas perplejos.
- Mi buen Hiros - dijo Awen - ¿ crees realmente que quiero el simbolo del Olmo ?... no te confundas soy Awen , hijo de Belverus y yo tengo algo que quizas tu hayas perdido , el honor y la palabra dada por mi padre , cuando se nos concedieron nuestras tierras , por la casa Agrimonte , puede que seas tu el que pretende controlar todo , pero no dejare que lo hagas en mi territorio , no sobre mi gente , tu y solo tu eres el que has estado siempre intrigando con unos y otros , y si mi poder es cada vez mayor en la clase politica es porque yo siempre he cumplido mi palabra , cosa que tu nunca has hecho -.
De repente un estallido de furia inundo a Hiros y con un fuerte golpe en la mesa se levanto y salio de la sala . - Creo que esta reunion ha terminado - le dijo con una sonrisa en la boca Belarus a su hermano , - si y sera mejor que nos vayamos de aqui rapidamente , no me fio de nadie , excepto de Armel-.
Ikaris , intentando poner calma y aparentando tranquilidad dio por terminada la reunion , instando a repetirla dentro de un mes , a lo que todos aceptaron.
Awen , su hermano e Icto bajaron por la escalera en direccion al patio interior de la entrada.
- La cosa esta muy mal Awen - le dijo Icto - si Icto pero no dejare que ese parasito de Hiros quiera tomar lo que es mio-.
Montaron en el vehiculo y se dirigieron a Bellver la casa familiar de Bellveria.
Se habia destapado la caja de Pandora en el seno de la corporacion y los tiempos que tenian que venir serian oscuros , muy oscuros.
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